13 de febrero de 2008

Mi fe me salvará (o falsa fe parte III)

Sus padres no tuvieron con él ningún cuidado, simplemente lo trajeron a este mundo, le abrieron la puerta y le dieron con ella en las narices. No, no es que le faltara de nada, pero se desentendieron de sus principales preocupaciones, siguieron con su vida como si la habitación del fondo estuviera habitada por algún ser que de vez en cuando vagabundeaba por la mesa de la cocina. No, tampoco fue algo premeditado, con lo que no pudo achacárles maldad alguna, eran así, y le creaban una infelicidad, un vacío que año tras año resultaba mas difícil llenar, hasta que un día encontró a Dios. Y a las drogas.
Sus padres no le querían, pero el rezaba, y se sentía mejor. Desde que comenzó con los porros se sentía culpable, pero el rezaba, y se reconfortaba. Por supuesto enseguida pasó a la coca y finalmente a la heroína pasando toda una seríe de medicinas alucinógenas trapicheadas en farmacias de guardia, pero el rezaba y era como un bálsamo para su conciencia.

Pronto las deudas lo dejaron en situación peligrosa para su vida, pensó en pedirle dinero a sus padres, pero recordó, no le querían, penso en pegarse un chute, pero claro, nadie le quería fiar, pensó en rezar, y se sintió mejor ... aunque de todos modos había que pagar la deuda y al final se arregló con un viajecito desde Colombia con un maletín del que no tenía que hacer preguntas. Todo fue bien, en Colombia consiguió mantener la calma y se sintió aliviado, pero decidió no dar gracias a Dios hasta haber pasado todo el trago entero. En Madrid la cosa no iba a ser muy diferente, un pequeño cacheo, dos o tres preguntas y para fuera de la terminal, dónde todo habría terminado.
Y a punto estuvo de terminar bien ... lástima que lo vieran, por el rabillo del ojo, como se santiguaba al abrirse las puertas automáticas dando las gracias a Dios.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

IMPRESIONANT!!!!!!!!!!

Com pot sortir d'un cap com el teu, una historia com aquesta!!!!!!!!

Jo penso provar lo de passar per l'aeroport, però crec que a mi me pasaria com a aquest, ja que jo no ressaria, però al final segur que me santiguaria.

Mario Lorenz dijo...

Tio, encara que no ho sembli, està basat en un fet real, però dóna que pensar eh?!

Anónimo dijo...

Al final el simbol de la creu te més força de la que ens pensem o volem creure.
Mira aquest pobre home!!!!!! L'ha portat a la garxola.
A altres els dona feina per a tota la vida, i a altres que no ho fan per la feina els porta a un cami sense sortida. A no ser que trobin a alguna neboda que els ajudi a cuidar la casa algunes nits.

Al final, el que es pot esperar, o el que vull pensar, es que cap simbol ens porta enlloc, i que és les actituds i els fets que tenim durant la vida, el que ens porta a on estem.

SIGUI BO O DOLENT

Mario Lorenz dijo...

No et falta raó, però pensa també que la vida pot ser molt injusta.

Tots volem creure que cadascú pagarà pels seus pecats, uns pensen que serà a l´altra vida, jo no puc pensar-ho perquè no hi crec, no tinc aquest consol i tinc que creure, repeteixo, tinc que creure que tot té la seva conseqüència aquí, no és una convicció, és una necessitat.

De fet i al final, per la majoria de la gent només es tracta de passar una bona estona i no complicar-se, potser seria millor, no ho sé ...